Aomame
se encuentra sola, en el edificio donde al anochecer busca en el parque a su
amado desde que una noche con el brillo de las dos lunas le encontró
observándolas con atención. Se ha negado a cambiar de vida, de cara y su propio
nombre después de asesinar al líder de la secta por encontrar y dar con su
estimado amor y que este la reconozca.
Tengo sigue
teniendo problemas, en este caso se suma el coma de su padre, por el que usa
como pretexto para estar cada día en lugar donde apareció, frente a él, por
primera vez la enigmática crisálida de aire. Cada día que va le lee fragmentos
de libros, periódicos o lo que tenga entre manos. A esto se le suma que Fukaeri
se encuentra en su apartamento y le avisa de que un empleado de la NHK va a
llamar a la puerta. Este empleado llamará a la puertas de los tres
protagonistas de forma molesta, desagradable y perturbable con amenazas y
gritos como advirtiéndoles de que alguien les está vigilando.
Murakami
consigue atrapar al lector con sus largas formas de describir situaciones,
personajes o hechos, con sus personajes variados y tan diferentes aunque todos
tengan en común la soledad. El universo de 1Q84 es fantasmagórico, misterioso,
perturbador, siniestro y parece carecer de salida.
Recomendado
para los adictos al escritor, para los que han leído muchas de sus novelas,
también para aquellos que quieran descubrir un mundo especial y mágico, en una
ciudad tan grande como es Tokio, descrito de forma realista, envuelta de
fantásticos sucesos como es la aparición de una segunda luna en el cielo
nocturno. Y por último, aquellos a los que
todavía no han leído nada de Murakami, no les defraudará las más de mil
páginas que tienen en total los tres libros.
Extractos:
Mientras escuchaba a volumen bajo la
Sinfonietta de Janáček, realizaba estiramientos y trabajaba sin piedad sus
músculos valiéndose de los aparatos. Necesitó casi dos horas para completar el
programa, que cada día aumentaba e iba perfeccionando. Luego cocinó, limpió el
piso, se sentó en el sofá y leyó En busca del tiempo perdido. Por fin había
llegado al volumen de El mundo de Guermantes. Intentaba mantenerse lo más
ocupada posible. En la televisión sólo veía el noticiario de la NHK del
mediodía y el de las siete de la tarde. Como de costumbre, no había ninguna gran
noticia. O sí, sí las había. En el mundo muchas personas perdían la vida. Gran
parte de estas personas, de una muerte dolorosa. Colisionaban trenes, se
hundían ferris, se estrellaban aviones. Se prolongaban conflictos civiles sin
aviso de solución, se cometían asesinatos y se perpetraban cruentas matanzas
entre etnias. Aomame sentía una gran lastima por todos aquellos que se veían
envueltos en esas tragedias y calamidades. Pero, en cualquier caso, no estaba
ocurriendo nada que pareciese ejercer una influencia directa sobre Aomame.
Llamó otras tres veces a la puerta
con un vigor que hasta entonces no había mostrado.
–Oiga señora Takai, se esconde
usted con un arte que ni un lenguado bajo la arena del mar. A eso se le llama
mimetismo. Pero no podrá pasarse toda la vida huyendo. Vendrá otro y abrirá
esta puerta. No bromeo. Servidor, que ya es todo un veterano de la NHK, se lo
garantiza. No importa lo bien que se esconda, porque el mimetismo, al fin y al
cabo, no deja de ser un engaño. Y con engaños no se resuelve nada, se lo
aseguro, señora Takai. Debo irme. Tranquila, que ahora no le miento. Me voy de
verdad. Pero dentro de poco volveré. Cuando llamen a la puerta, sabrá que soy
yo, señora Takai, que le vaya bien.
Editorial: Tusquets
Autor: Haruki Murakami
Páginas: 416
Precio: 22 euros
Book trailer:
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